28.10.05

 

Tokujin Yoshioka Vs. Patricia Garrido




Es verdad, todos los diseñadores en algún momento nos inspiramos en trabajos de personas que admiramos o en soluciones ingeniosas creadas por otros. Esto es legítimo siempre y cuando la “inspiración en” sea el punto de partida para una reelaboración que resulte en algo original. A este respecto hay mucha tela por cortar ya que la línea puede ser muy borrosa. Cuando no hubo un trabajo intelectual creativo serio, la sensación de “deja vu” con respecto a la idea original es inequívoca. Este es un caso en el que la idea original podría haber servido como punto de partida para innumerables variaciones y relecturas, y sin embargo imperó la pereza, que resultó en plagio. No es la primera vez que se usa acrílico macizo en el diseño de un artefacto de iluminación, de hecho es una de las propiedades principales del acrílico el ser un buen transmisor de la luz y tener un excelente coeficiente de transparencia. Creemos que Patricia Garrido tuvo más en cuenta el diseño del Japonés Tokujin Yoshioka que cualquier otra consideración sobre las posibilidades del acrílico. Esto se debe a que sencillamente su “diseño” (llamado Willy en su catálogo online) tiene las mismas proporciones que el diseño de Toshioka (el original se llama"Tofu", y puede ser visto en www.tokujin.com) . El único cambio efectuado fue el de haber corrido la fuente de luz algunos milìmetros. En su página hay otra ligera variante que omite agujerear el bloque de acrílico. Para que no se nos acuse de animadversión hacia alguien que no conocemos, solo resta ver las imágenes del original y de la copia. Eso si; en su página de Internet podremos leer lo siguiente:
_”Patricia Garrido es una artista plástica que trabaja para el mercado del arte y el diseño con la convicción de que la creación artística aplicada al diseño de interiores le agrega valor y provee al hombre de una mejor calidad de vida.
Al desarrollar sus productos, ella tiene en cuenta las necesidades actuales de orden funcional, sensorial y emocional, cada vez más integradas a la cotidianeidad humana. Percibe la función estética de la luz y utiliza el artefacto lumínico como un instrumento expresivo en sí mismo. Su proyecto creció con fuerza en base a la originalidad y la novedad de los productos, ofreciendo exclusivos diseños, con muy buena calidad y a precios accesibles. Esto le permitió cubrir con sus productos un segmento de mercado no explotado hasta entonces en su país.”
Consultamos el precio de la lámpara en cuestión, a lo que nos contestó que cada una cuesta el accesible y módico precio de 580$ (pesos quinientos ochenta..) Curiosamente los parecidos no terminan en el diseño, ya que el precio de la Tofu original en el sitio http://www.nova68.com/Merchant2/merchant.mv?Screen=PROD&Product_Code=US2763&Category_Code=12

es de U$ 560 (el milagro de la devaluación encima la favorece..)

Comments:
La producción argentina de artefactos de iluminación está atravesada de lado a lado por el plagio. A los industriales no se les mueve un pelo mientras calcan modelos de catálogos extranjeros. Ahora bien, conocemos a nuestros empresarios, pero que ésto se haga en nombre del diseño... A la parrilla con ellos!!!

Martin
Mendoza
 
Eso, a la parrilla! pero recuerden que esta parrilla necesita de nerca...Se agradecen aportes.
 
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